(CNN) — En 2017, Han Kwang Song se convirtió en el primer norcoreano en marcar un gol en una de las cinco ligas de fútbol más importantes de Europa. Y no solo eso: en 2019 fue transferido de manera sorprendente al gigante italiano Juventus, para luego pasar al Al-Duhail de Qatar.
Pero su prometedora carrera se vio truncada cuando en 2020 desapareció del fútbol mundial, circunstancia que dejó a los fanáticos con una pregunta: «¿Dónde está aquel jugador norcoreano?».
“El pequeño norcoreano”, como lo describió una vez un comentarista italiano, no era especialmente alto, pero con su ritmo abrasador, sus fuertes entradas y su cabezazo letal frente a la portería era capaz de competir entre los mejores de Europa.
El joven delantero de Pyongyang llamó rápidamente la atención de los expertos y fanáticos del fútbol, tanto por su experiencia única como por su destreza técnica.
“Su físico no era grande, pero era rápido con su posicionamiento y podía anotar bien de cabeza”, dijo a CNN Sport el comentarista de fútbol surcoreano Hahn June-hea.
Han fue elogiado en casa como “un jugador prometedor que llamó la atención del mundo del fútbol europeo”, según el medio de propaganda norcoreano, Sogwang.
Pero los buenos tiempos no duraron mucho, especialmente después de que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) impusiera sanciones contra Corea del Norte por realizar su sexta prueba nuclear en 2017.
Las sanciones ordenaron a los estados miembros que repatriaran a todos los ciudadanos norcoreanos que trabajaban en sus respectivas jurisdicciones, en medio de sospechas de transferencias de dinero extranjero para apoyar los programas nucleares y de armas de Kim Jong Un. La resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas fijó finales de 2019 como fecha límite para la repatriación.
Pero la pandemia de covid-19 llevó a Corea del Norte a cerrar por completo sus fronteras, lo que hizo imposible que Han y sus compañeros norcoreanos repatriados regresaran a casa. De acuerdo con las sanciones de la ONU, debía volar fuera de Qatar en 2021, y desde entonces no se supo más de él. Una investigación de CNN sobre su historia ha arrojado nueva luz sobre su desaparición.
Nacido en Pyongyang
Han nació en Pyongyang, la capital de Corea del Norte, en 1998. Poco se sabe de su vida, aparte de su inscripción en la prestigiosa Escuela Internacional de Fútbol de Pyongyang, fundada en sintonía con el amor que Kim Jong Un le profesa a los deportes.
Cuando Kim tomó las riendas del régimen, en 2012, el deporte se convirtió en una rara ventana a un país que a menudo está oculto al resto del mundo.
El líder norcoreano usó el deporte como un ejercicio de poder blando, invirtiendo en el deporte de élite para promover su país a nivel internacional y en el deporte público para mejorar la defensa y el poder laboral, según el informe del Ministerio de Unificación de Corea del Sur.
Corea del Norte comenzó a aumentar su participación en los principales eventos deportivos internacionales, incluidos los Juegos Olímpicos de Verano de 2012 en Londres y los Juegos Olímpicos de Invierno de 2018 organizados por Corea del Sur, que técnicamente sigue en guerra con su vecino del norte.
Sin embargo, en PyeongChang 2018 las dos naciones marcharon juntas bajo la Bandera de Unificación de Corea durante la Ceremonia de Apertura y participaron como un equipo coreano unificado en el hockey sobre hielo femenino. La apertura de Corea del Norte a través del deporte parecía una puerta que no se cerraría pronto.
“Todos los deportes son populares. Siguieron los Juegos Olímpicos y el fútbol”, dijo a CNN Sport el exentrenador de la selección nacional de fútbol masculino de Corea del Norte, Jørn Andersen, quien agregó que durante su estadía en Pyongyang, entre 2016 y 2018, tuvo un contacto limitado con el público norcoreano.
“Había algunos canales de televisión locales –nunca partidos en vivo– que a veces mostraban fútbol europeo durante la semana. Tal vez uno de la Bundesliga [en Alemania], uno de La Liga [de España], uno de Italia, Inglaterra… creo que muchos los vieron”, explicó Andersen sobre los eventos deportivos que se transmiten en la emisora estatal norcoreana KCTV casi todos los días.
En 2013, Kim fundó la Escuela Internacional de Fútbol de Pyongyang en el islote Rungna de la capital para fomentar el talento futbolístico, enviar estudiantes al extranjero y recibir a expertos –representantes de la FIFA fueron invitados a Pyongyang en 2014 para ayudar a educar a los equipos y a sus instructores locales– y a jugadores de fútbol del extranjero, en un esfuerzo por elevar el estándar del país en el deporte “al nivel mundial”, según la agencia estatal de noticias KCNA.
La escuela de fútbol también contó con instalaciones y programas exclusivos diseñados para fomentar el talento joven.
Solo unos meses después de su fundación, 14 estudiantes fueron enviados a España y 15 a Italia a expensas del Estado para aprender de clubes de fútbol establecidos, según Sogwang. Entre los muchos que se graduaron del prestigioso programa de élite, Han Kwang Song se destacó.
Su fama nacional es evidente en un video de YouTube publicado en un canal administrado por YuMi, un vlogger que los expertos creen que probablemente esté relacionado con funcionarios norcoreanos de alto rango y que puede ser parte de una campaña de propaganda destinada a cambiar la imagen internacional del país.
“Me gusta Han. Sus habilidades son sólidas y es muy bueno gambeteando”, dice en coreano un ciudadano de Pyongyang en el video.
Han se convirtió en la mayor historia de éxito de los esfuerzos de Kim por convertir al país en una potencia deportiva cuando fue reclutado por el centro italiano de exploración juvenil ISM Academy a través de su programa de identificación de talentos.
En 2015, el entonces ambicioso adolescente hizo las maletas para irse a Perugia –la capital de la región central de Umbría en Italia– ubicada a unas 168 kilómetros al norte de Roma, junto con el prospecto norcoreano Choe Song Hyok.
Mudanza a Europa
En la Academia ISM, el dúo se unió a jóvenes futbolistas de todo el mundo, compartiendo el mismo sueño de pasar por el camino competitivo hacia el juego profesional en una de las ligas más importantes de Europa.
La academia muestra con orgullo una foto de Han en su sitio web como un jugador que «alcanzó su objetivo y entró en el mundo del fútbol profesional». También aparece el amigo de Han, Choe, quien pasó a jugar para el AC Perugia Calcio, que juega en las ligas menores de Italia.
Han pasó al menos un año en la academia antes de una exitosa prueba con el equipo juvenil de Cagliari. La medida lo puso en el mapa y le dio reconocimiento regional.
“Recuerdo que mi director, Mario Berreta, dijo que teníamos a un norcoreano probándose y me preguntó si era lo suficientemente bueno”, dijo a CNN Sport Max Canzi, entonces entrenador de Cagliari para menores de 19 años.
“Estaba un poco molesto porque teníamos un partido importante ese sábado”, dijo Canzi, recordando que al principio se negó a ver al jugador.
“Comenzó a entrenar y, después de 20 minutos, miré a mi asistente y le dije: ‘Dile a Mario que tiene que salir. Tenemos un problema, él es muy bueno’”.
Sin embargo, poner la pluma en el papel tomó más tiempo de lo habitual por lo que Canzi describió como «problemas burocráticos» y «voces que circulan».
“Alguien en el parlamento [italiano] planteó la pregunta de si era lo correcto porque nosotros [Italia] teníamos un embargo contra [la firma de contratos con] los norcoreanos”, dijo.
Pero resultó ser una búsqueda que valió la pena para Cagliari.
El delantero norcoreano, que se unió al equipo juvenil del club con Canzi en marzo de 2017, demostró rápidamente su valía al anotar en su primer partido juvenil, lo que le valió un ascenso inmediato al primer equipo de la Serie A, según Canzi.
Han cabeceó y conquistó su primer gol en la máxima categoría. Era la primera vez que un jugador norcoreano anotaba en una de las cinco ligas principales de Europa, solo una semana después del 2 de abril de 2017, día de su debut profesional.
Han había llegado de Corea del Norte sin saber hablar inglés ni italiano, pero no tardó mucho en adaptarse a la cultura occidental, algo prohibido en su tierra natal.
“Al principio no fue fácil porque no sabía inglés ni italiano. Pero aprendió italiano bastante rápido”, recordó Canzi a CNN Sport.
Nicholas Pennington, excompañero de Han en el equipo juvenil de Cagliari, lo recuerda como «un jugador muy, muy bueno» en el campo y «un tipo un poco tímido pero muy agradable» fuera de él.
“Fui uno de los primeros en pararme a hablar con él y ayudarlo a integrarse. Lo recogía en el auto varias veces y vino a entrenar conmigo”, le dijo a CNN Sport.
Pennington recordó haberle preguntado a Han y Choe sobre Corea del Norte varias veces.
“Pero en realidad no dijeron nada. Creo que incluso se podía ver que tenían un poco de miedo de decir algo. Decían, ‘no sé’ y pocas cosas, eran muy reservados y no querían decir nada al respecto”, dijo.
Han apenas si habló sobre su familia en Pyongyang, dijo Pennington.
“Recuerdo que [Han] hablaba de su familia, decía que su familia estaba allí, que los extrañaba y que no sabía cuándo iba a ir a casa a verlos, porque obviamente en ese momento no creo que hubiera sido fácil para él viajar de regreso a casa y luego de vuelta a Italia. Recuerdo haber pensado que era una locura lo poco que hablaba sobre su hogar en comparación con lo que hago yo”, dijo.
Canzi, que vivió en Seúl durante tres años cuando era niño, también dijo que Han era “muy tímido, muy educado”.
“Cuando Han llegó por primera vez, usé las pocas palabras coreanas que sabía y dije ‘annyeonghasaeyo’ [hola, en coreano], y él dijo: ‘Wow, ¿qué está pasando aquí?’ Y cuando me pasó el agua en nuestra primera comida, yo dije ‘kamsahabnida’ [gracias, en coreano]”, recordó Canzi.
“El fútbol es raro, porque cuando juegas en un equipo y eres un buen jugador, le caes bien a todo el mundo. Él llegó y todos vieron de inmediato lo buen jugador que era”, señala Canzi.
“Aquí, en Cagliari, todo el mundo me quiere. Me siento como en casa”, dijo Han en italiano fluido en un video publicado por Cagliari en 2018.
Mientras estaba bajo contrato con el Cagliari, Han fue cedido al AC Perugia y a la Sub-23 de la Juventus antes de que Juventus asegurara su sorprendente transferencia por US$ 3,74 millones (3,5 millones de euros) en enero de 2020, según Transfermarkt.
“Esa fue una gran ganga para Cagliari porque él había llegado gratis”, dijo Canzi.
“Sí, me sorprendió bastante [el interés de Juventus]. Pensé que era un muy buen jugador, pero era joven y no podía imaginar hasta dónde podría llegar. Teníamos otros jugadores en el equipo bastante similares a él que, por supuesto, tenían muchas menos noticias alrededor [sobre ellos] porque el hecho de que fuera norcoreano era un gran problema”.
Jugar en la Serie A fue un hito para Han, pero mudarse a los Bianconeri –como llaman los fanáticos a la Juventus– fue un logro aún mayor.
“Ha sido un largo camino, pero por fin puedo decir que mi sueño se hizo realidad [después] de marcar mi primer gol en la Serie A y convertirme en el primer norcoreano en vestir una camiseta tan importante como la de la Juventus. ¡Mi sueño se hizo realidad!», dijo Han en una publicación escrita a través del Centro Internacional de Exploración ISM.
Sin embargo, el sueño de Han de vestir las famosas rayas blancas y negras duró apenas una semana, pues el Juventus lo negoció posteriormente al Al-Duhail de Qatar ese mismo mes por un traspaso de US$ 7,7 millones (7 millones de euros), según un informe del Grupo de Expertos del CSNU.
Mientras Han comenzaba su trayectoria en la primera división europea en 2017 ––marcando varios logros para Corea del Norte––, su país natal aumentaba las tensiones en la península coreana, poniendo a prueba lo que afirmó que era su primer misil balístico intercontinental.
El 3 de septiembre de 2017, Corea del Norte realizó su sexta prueba nuclear, lo que llevó a que el Consejo de Seguridad de la ONU impusiera una lista de sanciones ante la preocupación de que «las actividades nucleares y relacionadas con misiles balísticos que ejecuta la nación hayan desestabilizado la región y otros lugares».
Las sanciones exigían a todos los estados miembros que dejaran de conceder autorizaciones de trabajo a ciudadanos norcoreanos en sus jurisdicciones y, tres meses después, el CSNU decidió además que todos los ciudadanos de Corea del Norte que trabajaran en el extranjero y «generaran ingresos de exportación extranjeros que la RPDC [República Popular Democrática de Corea, o Corea del Norte] utilizara para apoyar sus programas balísticos nucleares prohibidos» fueran repatriados a más tardar el 22 de diciembre de 2019.
Han, titular de un pasaporte norcoreano, no fue la excepción a estas sanciones, a pesar de su talento futbolístico sobrenatural. Ahora bien, sigue sin estar claro cómo la Juventus y Al-Duhail continuaron con la transferencia en enero de 2020, que tuvo lugar después de la fecha límite del CSNU.
CNN se ha puesto en contacto con el antiguo agente de Han, Sandro Stemperini, y con Al-Duhail, para pedirles comentarios, pero no ha obtenido respuesta inmediata.
La Juventus no ha querido pronunciarse al respecto.
«No sé si estaba al nivel para jugar en la Juventus en ese momento. Lo que pasó después, no lo sé. Se fue a jugar a Qatar», dijo Canzi.
Paso por Qatar
La prometedora carrera de Han en Italia había terminado, pero el joven talento fue recibido calurosamente por el club de Qatar de primera división Al-Duhail.
Desde que se incorporó al equipo en enero, en plena temporada 2019/2020 de la Qatar Stars League, llegó a disputar 10 partidos de liga, marcando tres goles y desempeñando un papel importante en la conquista del título por parte del club.
Qatar había firmado con el norcoreano un contrato de cinco años y US$ 4,6 millones (4.310.000 euros) hasta la temporada 2023/2024. En ese sentido, Han recibió una remuneración de unos US$ 296.200 (270.000 euros) entre febrero y abril de 2020, según el informe del Grupo de Expertos del CSNU de mediados de 2020.
Han rendía admirablemente sobre el terreno de juego y quedaban dudas sobre si enviaba dinero a su país, como el CSNU dijo de otros norcoreanos que trabajaban en el extranjero.
El documento de la ONU muestra que Han había firmado un compromiso con un banco qatarí de no transferir «ningún costo o cantidad de dinero a Corea del Norte en ningún caso».
Su compañero y amigo Choe, que había viajado a Italia con Han, perdió la oportunidad de jugar en la Fiorentina, de la Serie A, después de que el Parlamento italiano abriera una investigación ante la posibilidad de que el régimen de Kim se estuviera apropiando de su salario.
CNN se puso en contacto con el Tribunal de Arbitraje Deportivo (CAS, por sus siglas en inglés) para pedirle un comentario sobre el recurso de la Fiorentina por un contrato que no es válido e incumple las sanciones de la Unión Europea con respecto a Choe. Tras comprobar sus registros, el CAS declaró que el caso de Choe «no parece haber sido remitido nunca» a la organización.
Aunque en el caso de Han no está claro si había estado enviando dinero al régimen de Kim, se sabe que Corea del Norte suele obligar a sus trabajadores en el extranjero a mandar dinero al gobierno en su país. El Grupo de Expertos del CSNU, en otro informe publicado en marzo de 2020, afirmó que está investigando a los nacionales de Corea del Norte sospechosos de obtener ingresos en el extranjero, entre los que también se incluyen «especialistas como jugadores deportivos».
El último partido de Han con el Al-Duhail fue el 21 de agosto de 2020, cuando salió de la banca contra el Al-Ahli en el final de temporada.
El entonces joven Han, de 21 años, levantó las manos mientras él y sus compañeros del Al-Duhail alzaban el trofeo de la Qatar Stars League, con una camiseta roja en la que se leía: «CAMPEONES».
Esta sería la última vez que los aficionados al fútbol verían a Han jugar un partido profesional. Al mes siguiente, cuando empezó la nueva temporada, Han ya no estaba ni en la alineación titular ni en el banquillo, y no había noticias de ningún traspaso.
Los meses pasaron sin ninguna novedad sobre el paradero de Han hasta que un informe final del Grupo de Expertos del Consejo de Seguridad de la ONU publicado en marzo de 2021 confirmó que el contrato del jugador se había rescindido con Al-Duhail a principios de ese año y que había sido expulsado de Qatar.
CNN se ha puesto en contacto con Al-Duhail y las autoridades qataríes para pedirles declaraciones, pero no ha recibido respuesta.
Sin embargo, cuando el mundo entró en el segundo año completo de la pandemia de covid-19 en 2021, Corea del Norte mantuvo sus fronteras selladas y restringió la entrada de personas y mercancías en el país por temor al virus.
Kim Jong Un incluso despidió a varios altos funcionarios en 2021 que no hicieron cumplir los estrictos esfuerzos de prevención del covid-19 del país. El rígido cierre de fronteras dejó a Han varado.
Han embarcó en un vuelo de Qatar Airways procedente de Doha el 26 de enero de 2021 cuando fue deportado, según una carta adjunta en el informe final del Grupo de Expertos del CSNU. Sin embargo, sin un hogar al cual regresar, el vuelo llevó a Han de vuelta a Roma, según confirmó a CNN Sport un funcionario familiarizado con el asunto.
«Sé que su directiva se lo llevó a Italia. Creo que sigue allí, pero no puede jugar más al fútbol… Ha tenido muy mala suerte de no seguir jugando y mejorando», declaró Andersen, ex entrenador de Han, a CNN.
CNN se ha puesto en contacto con el Ministerio de Asuntos Exteriores italiano y con la FIFA, pero no ha obtenido respuesta.
Según otro funcionario cercano al tema, Han vivía en una embajada norcoreana no especificada en 2021, a la espera de que se reanudaran los vuelos de regreso a Pyongyang.
Choe, que había viajado a Italia con Han, seguía en el país en 2021 «debido a la suspensión de los vuelos internacionales para entrar» a Corea del Norte, según el informe final del Grupo de Expertos del CSNU.
El funcionario agregó que algunas embajadas de Corea del Norte han estado alojando a los nacionales del país que no pueden regresar a casa pues las fronteras permanecen cerradas, con «algunas albergando muchas decenas [y más] de nacionales de Corea del Norte en ‘tránsito’ a largo plazo en bloques de alojamiento».
Un funcionario del gobierno de Corea del Sur declaró a CNN Sport que, a pesar de las sanciones de la ONU, «más de 100.000 trabajadores norcoreanos permanecen en unos 40 países, principalmente en China y Rusia, y ganan entre US$ 200 y US$ 300 millones en divisas al año».
Aunque su situación sigue siendo objeto de especulación, para Canzi y Andersen, es el sueño esfumado de Han de jugar en un célebre club de fútbol -––un sueño desvanecido solo por el lugar en el que nació–– lo que quizá constituya la mayor vergüenza.
«No será fácil que vuelva a ese nivel, pero es posible. Si tiene la oportunidad de volver, sería una motivación muy buena… Por supuesto, habría tenido una buena carrera y ganado un buen dinero, así que es un desperdicio», dijo Canzi.
«Durante casi dos años no ha jugado al fútbol, creo que solo ha entrenado con un equipo pequeño, no sé cuál, pero no ha jugado al fútbol. Así que ha perdido gran parte de su calidad», dijo Anderson, con tristeza.
«Siento mucho por él que haya tenido que dejar de jugar al fútbol. Tenía mucho talento».