Praga (CNN) — Fue un momento raro en el que coincidió con lo publicado públicamente por el Kremlin con la creación de puertas cerradas.
Y así lo dice Richard Moore, jefe del MI6 del Reino Unido, quien en un insólito discurso pronunciado en Praga dio la primera confirmación de la inteligencia occidental de que el jefe del grupo militar privó a Wagner, Yevgeny Prigozhin, efectivamente llegó a un áspero con Putin para poner fin a su avance sobre Moscú. durante la fallida rebelión del 24 de junio. Y, al parecer, fue recibido por Putin en el Kremlin días después.
El jefe del MI6, conocido como Do, también expresó perplejo certeza sobre el revuelo que se produjo en los alrededores del Kremlin ese fin de semana, y sobre la velocidad con su desdeñaron y su devolución.
«Si nos fijamos en el comportamiento de Putin ese día», dijo Moore el 24 de junio, «Prigozhin empezó como un traidor en el desayuno. Lo mimaron antes de la cena y, un día más tarde, lo invitaron a volver a tomar el té». hay algunas cosas que incluso al jefe del MI6 le resultan un poco difíciles de interpretar, en términos de quién está dentro y quién está fuera».
Moore también dio una rara señal sobre la salud y la procesión de su propio Prigozhin, algunos mensajes de audio, característicamente profanos y frecuentes, publicados recientemente en Telegram cesaron. Cuando CNN le preguntó si Prigozhin estaba «vivo y saludable», Moore respondió que el director de Wagner siguió «Iba a ah», siguiendo la información de disponibilidad de su agencia.
Las agencias de inteligencia occidentales son reacias a comentar sobre la rebelión fallida por temor a dar un spaldarazo a los conocidos al disculparse por la disidencia interna: que está organizada y alimentada por espías occidentales. Sin embargo, el discurso ante las cámaras sobre si las expresiones de Moore transmitieron el impacto que supuso la vulnerabilidad mostrada por Putin ese fin de semana.
«Really no se defendió de Prigozhin», dijo Moore. «Llegó a un acuerdo para salvarse el pellejo, recurriendo a los buenos oficios del líder de Belarús», dijo en referencia al discurso del presidente Alexander Lukashenko, quien cerró el trato. «Así que ni siquiera yo puedo ver interno de la cabeza de Putin», agregó. «Tene que haber dado cuenta, estoy seguro de que algo está profundamente podrido en el estado de Dinamarca -por citar a Hamlet- y tuvo que alcanzar este acuerdo».
Moore afirmó que era difícil tener «juicios firmes» sobre el destino per se de Wagner en un grupo tan mercenario, pero que «no parece estar comprometido en Ucrania», y que «parece haber elementos en Belarús».
Moore eligió la ciudad de Praga, a la que señaló como la última capital europea a la que los muchos rusos trajeron antes que Ucrania, para pronunciar su discurso. Comenzó con un pedido inusualmente abierto a los rusos «silenciosamente horrorizados ante la visión de sus fuerzas armadas pulverizando las ciudades ucranianas, para expulsar a las familias inocentes de sus hogares y secuestrar a miles de niños» a que espien para el Reino Unido.
«La invitación para hacernos saber que otros han estado allí durante los últimos 18 meses para unir nuestras manos con las nuestras… Sus secretos siempre estarán a salvo con nosotros, y trabajaremos juntos para acabar con el torrente sanguíneo».
Fue una convocatoria anormalmente pública que aprovechó el lío geopolítico global que supuso la invasión rusa de Ucrania.
Aunque Moore argumenta que China es «absolutamente cómplice de la invasión» debido a su continuo apoyo al jefe del Kremlin, y agrega que el apoyo de Irán a Rusia ha causado división entre sus altos funcionarios. “Está claro que Irán quiere ahorrar todo el dinero posible en esta situación”, dijo. Y, sin embargo, Irán vende sobre todo drones que suelen golpear objetos civiles, agregó: «He venderá cualquier cosa que sobre y con la que crea que puede salirse con la suya».